Sorpresas y no sorprendidas: Maridaje Perfecto

Sorpreshola¡¡
A finales de Octubre, con la vuelta al cole totalmente organizada-o casi, a falta de unos pequeños detalles que, debido a las editoriales, vienen con retraso- y los relojes cambiados, podemos decir que el otoño está instalado. Sobre todo si hoy, miramos por la ventana y, contemplamos cómo llueve...
No es de extrañar.
Tampoco ha resultado extraño que días atrás Toledo haya sido elegida la capital española de la gastronomía en 2016.
Toma el relevo de Cáceres, a fin de potenciar- como objetivo final- el turismo gastronómico.
Sin embargo, cualquier momento es bueno para disfrutar de los productos D.O. que ofrece la provincia, sin necesidad de esperar al, cada vez más próximo, 2016.
Y eso hemos hecho...no esperar para comenzar a juzgar si ha sido, o no, acertada la elección.
¿Algún plan más interesante que disfrutar de la mejor compañía, pasear por las calles del casco antiguo primero y degustar una cálida cena después?. La verdad es que lo dudo mucho¡¡.
El primer paso, reservar mesa y el siguiente ponerse unos tacones insoportables para llegar, casi a duras penas, hasta el lugar elegido. Bien?, ¡¡Pues venga que nos vamos¡¡.
Con este fin (y por supuesto de disfrutar todo lo que el entorno y la compañía ofrecían), asistimos a la cena maridaje, primera de la temporada, que el Hotel Cigarral del bosque, celebraba el pasado viernes.
Y digo primera porque una vez allí, nos informaron que desde Octubre y hasta el mes del Mayo, suelen celebrarse de forma mensual, coincidiendo en viernes y siendo finales de mes.
Este hotel, inaugurado en 2004, cuenta con unas magníficas vistas al casco antiguo de la ciudad y está situado en una de las casas señoriales más antiguas de la ciudad, a pesar de la modernidad del edificio y sus instalaciones. La verdad es que es un lugar que merece la pena visitar. Os dejo el enlace por si queréis daros un paseo por estas instalaciones y ver, en la lejanía, la majestuosidad de San Juan de los Reyes http://www.hotelcigarralelbosque.com/.
La cena comenzaba a las 21.30hrs. Puntuales, probamos el primero de los vinos de la noche. Blanco, algo seco y con un sabor diferente debido, quizás, a la fruta que aromatizaba el caldo.
El salón, debidamente acomodado, las mesas numeradas y con faldones negros que daban empaque al lugar desde el que se podía contemplar esa maravilla de casco histórico que tiene la ciudad.
Igual es casualidad, pero el número que más me gusta fue el que presidia nuestra mesa. Casualidad, destino o suerte tal vez...
La cena, una delicia de menú- de la que no puedo dar datos gráficos, porque no era adecuado andar lanzado flashes de forma continúa¡¡ jajajjaaa. Eso sí, con la impresión del menú no hubo problema- acompañada con vinos de una bodega familiar, Bodegas Alonso Cuesta, SL. http://www.alonsocuesta.com/
Con una extensión de 33 hectáreas de viñedo y ubicada en La Torre de Esteban Hambrán, esta bodega familiar fue fundada hace algo más de 70 años con cepas de las variedades garnacha, cabernet sauvignon, syrah, tempranillo, verdejo y sauvignon blanc. Muy recomendables los vinos servidos, a pesar de no ser una experta en esta materia, por lo que también, sacamos provecho de la ocasión, para aprender algo más sobre enología.
Pero para poder juzgar... ¡probar¡. O eso al menos, es lo que se dice.
Grata sorpresa las instalaciones del lugar, sus vistas, el servicio y la cocina que ofrecen.
Maridaje perfecto para dos.
Listos para volver cuando fuera posible.
Dejo las poquitas instantáneas que el fotógrafo de cabecera pudo captar.
Espero que os gusten tanto como a nosotros.